“Pájaros de lumbre” Poesía sudcaliforniana contemporánea

“Pájaros de lumbre” Poesía sudcaliforniana contemporánea

Poesía sudcaliforniana contemporánea en el interés de ICALC, UABCS y Barco Varado Ediciones

* “Pájaros de lumbre”; tres voces jóvenes, contundentes, descriptivas sensibles

* Compilación de poemarios premiados de “Juegos Florales Margarito Sández Villarino” 2019, 2020 y 2021

“Tampoco los poetas hacen lo que hacen en virtud de alguna sabiduría, sino más bien a causa de una cierta disposición natural y en estado de inspiración, tal como los adivinos y los vates.” (Platón)

Condenarro

Como parte del proceso de crear una “nueva normalidad”, al menos en lo que a eventos de manifestación social por medio de las artes, en ésta ocasión, la poesía, el Instituto para la Cultura y las Artes de Los Cabos (ICALC), en el marco de “Las noches de plenilunio”, escenario ya tradicional de expresión artística, nacida de la idea de Conchita Cabrera, y original, de expresión poética, presentaron la antología “Pájaros de lumbre, que reúne a dos poetizas y un poeta, los tres jóvenes nativos de la entidad, ganadores de los premios de los “Juegos Florales Margarito Sández Villarino” entre 2019 y 2021, editado y publicado por Barco Varado ediciones en coordinación con la UABCS.

“Pájaros de lumbre” Poesía sudcaliforniana contemporánea

El evento tuvo a lugar en el lobby del Pabellón Cultural “Nabor García” en Cabo San Lucas, lugar al que asistieron amantes de la poesía y literatura, así como artistas y promotores de la cultura y las artes, entre quienes destacaron, Conchita Cabrera, Anabell Nixania y Alfonso Wilson, ambos creadores de Herman Ita de Ysabella, sala de lectura y cómplices de Keith Ross en la aventura de Barco Varado Ediciones; como maestra de ceremonias la también poetiza, Mercedes Reynoso y presidiendo la presentación Calafia Pozo, directora de ICALC, quien presentó a las autoras y el autor.

El poemario objeto del evento, “Pájaros de lumbre”, título tomado de los poemas de Yaroslabi Bañuelos, consta de cinco partes, una introducción de Calafia Pozo, el prólogo de Keith Ross y los poemarios galardonados.

Yaroslaby Bañuelos Ceseña, originaria de La Paz, ya ha publicado poemarios e incluso obtenido reconocimientos y premios de poesía en la capital estatal, en la obra que mencionamos, habla de la importancia de la identidad y la conservación de las etnias, principalmente, en estos textos al menos, de la pericú, su poemario titulado Mejibó (Temporada de flores), obra que precisa de leerse con calma, releerse en voz alta y adentrarse en la conjunción de la tierra que habitamos, su historia, evolución, sin perder de vista el origen, la identidad y pertenencia que invitan e incitan a seguir con la lectura.

La presentación concluyó con la música de la cantautora María Martí.

Por su parte, Paulina Solís Alvarado, nativa de Ciudad Constitución, en su poemario titulado “Si buscas a la ausente la encuentras dormida entre tu mundo y el silencio”; si bien su producción poética no ha sido tan prolífica, hasta la fecha, a su cortedad ya ha obtenido reconocimientos y premios a su obra y se ha desarrollado con participación en coloquios y publicaciones literarias en BCS. Paulina expresa su sentir, al través de la poesía, con un vocabulario cotidiano, sin acudir a un lenguaje rebuscado para potencializar sus metáforas, utiliza de forma excelente y elocuente esa fuerza que la lleva a escribir y compartir sus experiencias, sentires y sensibilidad, desde la vista cotidiana de una mujer que comprende la complejidad de un mundo que ya era viejo.

A lo que la poesía de Mario Montaño Romero se refiere, es preciso que si bien, con mayor experiencia literaria y de vida, el también nativo de La Paz, BCS, cuenta ya con una trayectoria en la actividad de promoción y fomento a las artes desde el inicio del presente Siglo, su trabajo “Poemas para archivar en una oficina”, expone, con cadencia la decadencia de la rutinaria vida de la burocracia, pública o privada, en éste caso no hay elementos diferenciales entre uno y otro; con sutiles figuras retóricas adecua, sin darnos cuenta hasta el final de cada verso, las descripciones metafóricas de la deprimente rutina de un burócrata… de lunes a lunes. Al terminar su poemario de forma inherente a su poesía acudió a mi memoria Efraín Huerta con su poemínimo “Salvajez”. Si el lector no lo conoce, seguro que google lo salva de quedarse con la duda.

“La poesía no tiene tiempo, el que la lee la rescata, la hace presente y luego la regresa a su eternidad.” (Doménico Cieri Estrada)